Capítulo 305
¡Carambal¿Cómo es posible que haya hombres con tan poca habilidad para expresarse?
Marisol estaba furiosa: “¿Podrías hablar más claro, por favor? ¿Cualquier mujer malinterpretaria eso!”
Javier también se dio cuenta de la gravedad de la situación y dijo de inmediato: “Sería mejor que fueras a buscar a la Sita, Femanda enseguida, temo que si tardas en explicarle, la Sita. Femanda cortará todo contacto contigo!”
Antes de que terminara de hablar, Fabio ya habla desaparecido.
Javier, viendo como Fabio corria hacia fuera, no pudo evitar sorprenderse: “De verdad, ¿para qué tienes boca si no sabes usarla apropiadamente?”
Por otro lado, Femanda ya estaba en el auto y Ana preguntó: “Srta. Femanda, ¿volvemos a la familia Sierra?”
Justo después de responder, el teléfono de Femanda comenzó a sonar, Pensando que era Fabio, estaba a punto de colgar pero cuando vio que la llamada era de Isabel, Femanda contestó la llamada, y antes de que pudiera hablar, Isabel, del otro lado, empezó a hablar de manera agitada: “Femandal Algo temble ha ocurrido!”
“Tia, calmate, ¿qué ha pasado?”
“Tu tio, tu tio ha sido llevado por los hombres de Sebastian!”
“¿Qué dices?”
Femanda frunció el ceño.
¿Sebastián había capturado a Julio?
“Los hombres de Sebastián irrumpieron aquí y se lo llevaron!”
Entre lágrimas, Isabel dijo: “Sebastian me dio una dirección, me dijo que te avisar para que fueras, y si no lo haces, va a matar a tu
tio!”
“Dame la dirección“.
“Es en la habitación 8023 del Hotel Real!”
Al oir esto, la tensión en el rostro de Femanda desapareció, y su voz se volvió fria: “Está bien, voy para alla“.
Después de decir esto, Femanda colgó.
Ana, quien había escuchado la conversación, preguntó apresuradamente: “Srta. Femanda, ¿vamos al Hotel Real?”
“No, volvamos a la familia Sierra“,
“¿A la familia Sierra? Pero Sebastián…”
“Si Sebastian realmente capturó a mi tio, ¿por qué me citaria en un hotel? ¿No seria mejor amenazarme después de que regrese a casa? Definitivamente hay algo sospechoso aquí“.
Isabel siempre ha sido astuta, seguramente estaba tramando algo.
No sería tan ingenua como para confiar en una mujer como Isabel.
Lo más importante ahora era volver a la familia Sierra para descubrir la verdad
En poco tiempo, llegaron a la puerta de la familia Sierra.
“Solo enviando a Femanda al lado del Sr. Borrego, el asunto del divorcio naturalmente no prosperara“.
Femanda escuchó la conversación entre Isabel e Iván dentro de la casa,
Apenas entró, vio la sonrisa en el rostro de Isabel, ¿dónde estaba el llanto que habla en la llamada telefonica?
Al escuchar pasos, Isabel se giró y al ver que em Fernanda, su sonnsa se congelé.
Femanda soltó una risa fria y dijo: “Vaya, tia, qué buena actuación“.
Fer, Femanda.
Isabel se puso nerviosa, no esperaba que Fernanda regresara en ese momento, y su sonrisa se tomó torpe: Femanda, como….¿cómo es que estás aqui?”
¿Cómo es que estoy aqui?”
El tono de Fernanda se volvió más frio: “Más bien deberia preguntar, tia, ¿qué estás tratando de hacer?”
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Capitulo 306
