Capítulo 160
“SI, señore“.
Femanda se acercó a Sebastián, quien no parcia tener intención de hablar. Asl que ella simplemente se sentó frente a él y dijo: “Engañándome para que regrese, ¿qué es lo que me quieres decir ahora?”
“La parcela en la zona de águas residuales, a quién se la vendiste?”
Femanda se no: “¿No lo has investigado tú mismo?”
Desde que se habia difundido la noticia de que la zona de aguas residuales seria reforestada, Sebastián solo le habla preguntado una vez y luego nunca habla vuelto a mencionarlo.
Ella no creia que Sebastián dejaria pasar tan fácilmente esa oportunidad
Al ver que ella no queria hablar, seguramente investigaria por su cuenta
Probablemente, Sebastián ya habia recibido la falsa información que cila habia difundido.
que
Sebastián le pidiera volver para preguntarle, era obvio que no estaba satisfecho con los resultados de su investigación.
“Yago nunca ha existido en Laguna Verde“.
Sebastián observó la reacción de Femanda en ese momento.
Por supuesto, Femanda no mostro ninguna falla.
Yago era ella ella era Yago.
Solo era una identidad falsa, de razón que Sebastián no pudiera descubrir nada.
“¿Cómo voy a saberlo? Tal vez sea un empresario extranjero“. Femanda desvió el tema con indiferencia: “Me engañaste para q regresara solo para preguntarme eso? Realmente no tengo tiempo para responder a tus preguntas aburridas“,
que
Femanda pretendió levantarse, pero Sebastián, conteniendo su aliento como si estuviera cediendo, preguntó: “¿Hasta cuándo piensas seguir enfadada?”
Habian pasado tres meses desde que Fernanda no volvia a casa tres meses.
Él había pensado que si la dejaba sola un tiempo, Femanda se daria por vencida, pero no esperaba que esta vez ella no tuviera ninguna intención de ceder.
“No estoy enfadada, pero dado que no quieres divorciarte, solo me queda forzarte a hacerlo“.
Al cir las palabras de Fernanda, la furia de Sebastián se desató de inmediato: “¿Fernanda, realmente tienes que divorciarte? ¿Tanto te gusta Fabio?
Te lo he dicho muchas veces, jesto no tiene nada que ver con Fabio!”
“¿Crees que te voy a creer?”
Sebastián, agarrando la muñeca de Fernanda, dijo: “Quieres el divorcio, si no es por Fabio, entonces por qué? ¿Es porque a Fabio le gustas, puede darte dinero y salvar a la familia Sierra, verdad?”
Femanda, viendo como Sebastián se comportaba en ese momento, solo pudo reirse: “Si, a Fabio le gusto, puede darme dinero, puede proporcionar mejores recursos para la familia Sierra, asi que deseo divorciarme de ti lo antes posible, estás satisfecho ahora?”
Sebastián estaba furioso, siempre había sabido controlar su temperamento, pero últimamente Femanda lo provocaba muy fácilmente. Intentó suprimir su ira y dijo: “Entonces, ¿estos tres meses has estado con Fabio, verdad?”
Durante estos tres meses, habia estado vigilando a Fernanda en secreto, pero los hombres de Fabio los interceptaban. Sus hombres ni siquiera habian logrado ver la sombra de Fernanda!
Esa sospecha había estado en su corazón durante ese tiempo.
Solo esperaba la respuesta de Fernanda.
Femanda, viendo la ira en los ojos de Sebastián, se rio con sarcasmo: “¿Qué crees?”
“Zorral” Sebastián empujó violentamente a Fernanda, quien cayó de espaldas en el sofá, pero se sintió liberada.
Viendo a Sebastián tan enfurecido, recordó la desesperación de su vida pasada.
Sebastián, por culpa Lorena, nunca se habia preocupado por ella, su esposa, ni siquiera cuando estaba en la mesa de operaciones sufriendo una hemorragia por un parto complicado.
La voz de Sebastián por teléfono em tan calmada, casi deseando que ella muriera de inmediato.
11:27
Fernanda todavia recordaba con clandad como, justo antes de su muerte, todas las reservas de sangre tipo A del hospital hablan sido desvindas
Salvo por Sebastián, nadie más en Laguna Verde podria haber logrado algo ant
Sebastián, era un asesinol
Había hecho de todo para estar con Lorena, ni siquiera dudó en matar a su propia esposa para que el lugar de la fra Borrego quedara vacante y Lorena pudiem entrar oficialmente en la familia Borrego
Ahora, aunque ella y Fabio solo tenian trato normal, él se aferraba a eso sin soltanto
Resulta que el también temia que su esposa le fuera infiel y eso le generaba esa funa.
